Tener en cuenta que el color de las piedras puede variar ligeramente ya que son piedras naturales

- Cornalina: La Cornalina te aterriza y ancla en la realidad presente. Es una piedra estabilizadora de alta energía, excelente para restaurar la vitalidad y la motivación, y para estimular la creatividad. 

Psicológicamente, la Cornalina imparte aceptación del ciclo de vida y disuelve el miedo a la muerte. Antiguamente, se usó para proteger a los muertos en su viaje al más allá. Infunde coraje, fomenta las elecciones de vida positivas, disipa la apatía y motiva para el éxito en lo negocios y otros asuntos. 

La Cornalina es útil para superar el abuso de cualquier tipo. Esta piedra te ayuda a confiar en vos mismo y en tus percepciones. 

Mentalmente, la Cornalina mejora las capacidades analíticas y clarifica la percepción. 

Retira los pensamientos erráticos durante la meditación y sintoniza a los soñadores con la realidad cotidiana. 

Emocionalmente, esta piedra es una poderosa protectora contra la envidia, la rabia y el resentimiento, de uno mismo o de otras personas. 

Calma el enojo y disipa la negatividad emocional, reemplazándola por el amor a la vida. 

- Ambar: El ámbar tiene propiedades analgésicas y antiinflamatorias naturales, lo que lo convierte en una piedra útil para tratar dolores musculares, dolores de cabeza y artritis. Además, puede ayudar a mejorar la circulación sanguínea y a fortalecer el sistema inmunológico.

El ámbar se considera una piedra protectora y estabilizadora de la energía. Puede ayudar a equilibrar y armonizar los chakras y a eliminar la energía negativa del cuerpo. También ayuda a aumentar la confianza en uno mismo y la creatividad.

El ámbar es una piedra con una larga historia en el ámbito espiritual. Puede ayudar a conectar con el mundo espiritual y a aumentar la intuición. Además, ayuda a liberar emociones reprimidas y a traer la calma y la serenidad a la mente.

- Lapislazuli: Abre el tercer ojo y equilibra el chakra de la garganta. Estimula la iluminación y potencia el trabajo con los sueños y las capacidades psíquicas, facilitando el viaje espiritual y estimulando el poder personal y espiritual. Esta piedra libera rápidamente el estrés, trayendo una paz profunda. Posee una enorme serenidad y la clave de la realización espiritual. 

Lapislázuli es una piedra protectora que contacta con los espíritus guardianes. Reconoce el ataque psíquico, lo bloquea y devuelve la energía a su fuente. Enseña el poder de la palabra hablada, y puede invertir maldiciones o inquietudes causadas por no haberse expresado en el pasado. 

Esta piedra armoniza los niveles físico, emocional, mental y espiritual. Los desequilibrios entre estos niveles pueden producir depresión, inquietud y falta de propósito. Cuando se está en equilibrio, esta armonía aporta un profundo autoconocimiento interno. 

Revela la verdad interna, fomenta la autoconciencia y permite la autoexpresión sin retener nada ni hacer concesiones. Esta piedra aporta a la personalidad cualidades duraderas de honestidad, compasión y rectitud. 

Estimula las facultades mentales superiores, aportando claridad y objetividad. Ayuda a expresar tus opiniones y armonizar el conflicto. Enseña el valor de la escucha activa. 

Establece relaciones de amor y amistad, y ayuda a expresar los sentimientos y emociones.